Ungida para estar callada | Estudios Biblicos |

Proverbios 13.3 El que guarda su boca guarda su alma; Más el que mucho abre sus labios tendrá calamidad.

¿Estás ungida para estar callada?

El apóstol Pablo escribe acerca de los peligros de palabras vanas, necias, e inútiles (Efesios 5.4; 1 Timoteo 6.20; 2 Timoteo 2.16). El escritor del proverbio advierte que un hombre que habla precipitadamente todo lo que pasa por su mente, terminara en un desastre.

Hubo un tiempo en mi vida cuando simplemente no podía quedarme callada. Siempre he sido habladora, y eso no es totalmente malo, si la persona puede aprender a usar sabiduría acerca de cuándo hablar. He aprendido a estar callada también, para acompañar la habilidad que Dios me ha dado para comunicarme.

El equilibrio es clave para evitar problemas.

Quizás seas ligera para hablar, y no has permitido que Dios te unja para estar callada. Déjame recordarte que Santiago dice que nadie puede dominar su lengua (Santiago 3.8). Sin duda necesitaras la ayuda de Dios. Pide que el Señor tome control cada vez que estás hablando demasiado, o muy fuerte, o simplemente cuando no es necesario.

Recuerda también que debes pensar antes de hablar. Santiago dice que debemos ser prontos para oír, tardos para hablar, y tardos para airarnos.

Pregunto de nuevo, ¿has sido ungida para estar callada? Si no es así, pide que Dios te ayude.

Haz esta oración:


“Padre, ayúdame cuando estoy hablando demasiado o cuando hablo muy fuerte. Enséñame cuando debo estar callada. En el nombre de Jesús, ¡amén!”

No olvides visitar nuestra seccion de Predicaciones y Sermones.

1 comentarios:

Unknown dijo...

La verdad a mi me pasaba lo mismo pero gracias a Dios también he ido aprendiendo que hablar lo necesario es lo mejor,y este aporte me fue de mucha bendición gracias.

Publicar un comentario